Una decena de taxistas de Bizkaia impulsó hace unas semanas la constitución de una asociación para incorporar a sus vehículos mejoras tecnológicas que incrementen su tranquilidad al volante y mejoren la calidad del servicio. Plantearon la incorporación de botones antipánico, cámaras de seguridad e incluso tablets en los cabezales de los asientos con las que los usuarios puedan visualizar, mientras completan su viaje, servicios que se extienden a su alrededor y en los municipios cercanos. Esta medida innovadora busca evitar «todo tipo de situaciones de riesgo» a las que se enfrentan los taxistas, sobre todo, entre los que trabajan de noche. La iniciativa, pionera en España, les ha convertido en los primeros profesionales del sector en hacer uso de las nuevas tecnologías.
Así, la Asociación para la Innovación en el Transporte de Pasajeros Innovatec -conformada por cuatro taxistas de Bilbao, otros cuatro de Basauri, uno de Etxebarri y otro de Vitoria- ha incorporado en los cabezales de sus vehículos una tablet de diez pulgadas con la que los pasajeros encuentran en diferentes idiomas -de momento euskera y castellano, aunque pronto también en inglés- información de su interés: desde la posibilidad de encargar comida en un restaurante hasta reservar una plaza hotelera, además de publicidad. Es la alternativa que de momento ayuda a los dueños de los vehículos propietario a amortizar la inversión.
Un pequeño cartel amarillo informa de la presencia de cámaras de seguridad, que enfocan tanto al interior como al exterior del vehículo y que permite a los taxistas conocer lo que sucede a su alrededor en tiempo real; y el botón, junto al volante, que puede sacarles de cualquier apuro. Sólo con pulsarlo la Ertzaintza recibe la localización exacta del turismo, lo que garantiza socorrer a los conductores «en cuestión de minutos».
Las principales compañías gremiales de Bilbao han acogido con buenos ojos esta iniciativa que, indican, ya conocían, ya que hubo un tiempo en el que estuvieron «a punto» de sumarse a ella. Pero -tal y como indicaron a este periódico-, reman en otra dirección. «Aunque lo vemos bien y por supuesto lo apoyamos, nosotros hemos ido por otro camino, de momento, haciendo otra serie de apuestas. Hemos renovado el sistema interno de comunicación y lo hemos enfocado más hacia las mejoras del propio servicio que hacia la innovación», señala Borja Musons desde Radio Taxi. La iniciativa resulta, a su juicio, «arriesgada», y eso es algo que también ha frenado a más de un taxista. Aunque de momento es algo «precipitado», si funciona bien no descartan unir fuerzas y sumarse, aunque, de momento, han apostado por la mejora del servicio, reduciendo el tiempo de espera o mejorando la recepción de llamadas.
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